Por Jorge Rodríguez Antolín
Irreverencias
“Los padrotes son originarios de poblaciones rurales con fuertes raíces indígenas” Óscar Montiel, 2008
La trata de personas, un problema complejo
Socialmente una de las problemáticas más complejas de nuestro país es la trata de personas. La ciudad de México, Puebla, Chiapas y Tlaxcala han sido de las entidades más afectadas al respecto, esto no quiere decir que en el resto del país no suceda. Desde mayo de 2017, el actual Gobierno del Estado de Tlaxcala cuenta con un documento electrónico de cincuenta páginas, titulado “Trata de personas en el Estado de Tlaxcala, una mirada integral” http://www.tlaxcala.gob.mx/Trata_de_Mujeres.pdf
En dicho documento se menciona que la violencia contra las mujeres y la trata de personas se encuentran arraigadas en la sociedad tlaxcalteca como un fenómeno cotidiano que refleja cierta indiferencia y permisividad social de la violencia que se ejerce en contra de las mujeres.
Ahí mismo, se menciona que la Procuraduría General de Justicia del Estado en 2012 logró tres sentencias condenatorias en contra de seis responsables por el delito de trata, 17 víctimas fueron rescatadas.
En 2013 se reportó una sentencia condenatoria; en 2014 se reportaron tres sentencias condenatorias, nueve procesos penales en instrucción; y para 2015, 12 sentencias condenatorias, 171 operativos, rescate de 85 menores, clausura de 263 inmuebles y el rescate de 126 víctimas, remiten a datos del INEGI 2015. No especifican en qué municipio, pueblo o ciudad sucedió cada caso.
El caso de las mujeres de Tenancingo
Tenancingo es el municipio emblemático de Tlaxcala dónde predomina una cultura de complicidad y por ende de permisividad en el ejercicio de la trata de mujeres con fines de explotación sexual, ello no significa que, el resto del estado este exento de esta problemática, pues de no actuar de manera determinante esto se puede seguir expandiendo.
El caso de las mujeres de Tenancingo es ampliamente conocido, no nada más en México. Discovery Chanel ha realizado reportajes especiales de lo que sucede en dicha población. Tenancingo, municipio cercano a la ciudad de Puebla, se ha convertido en la “capital mexicana de la trata de mujeres”. Ahí se reclutan féminas no sólo de Tlaxcala, sino de otras partes de México, así como de otros lugares del mundo.
En Tenancingo, pareciera ser una cuestión cultural que las niñas piensen desde pequeñas que esa será su “profesión” cuando grandes. Por otro lado, los niños son “educados” o “entrenados” por sus propios padres para dedicarse al tráfico de mujeres. Se han reportado casos de mujeres menores de edad y adultas (niñas y adolescentes son las de mayor riesgo), con bajos niveles de escolaridad o analfabetas, en pobreza, desempleadas, con antecedentes de violencia física o sexual en familia, madres solteras, adictas (en algunos casos), etc.
Lamentable lo que sucede en Tenancingo es conocido por funcionarios de distintos niveles que van desde Presidentes municipales, Gobernadores, Diputados, Senadores, Presidentes de la República, parece que la trata en Tenancingo es en un problema incontrolable. Es evidente que hay muchos intereses involucrados, se ha vuelto prácticamente el “oro negro” de los lenones, seguramente, la derrama económica es cuantiosa y, al menos, en Tenancingo muchas familias dependen de este viejo oficio.
En Tlaxcala, hasta febrero de 2016, se han registrados más de 50 Organizaciones de la Sociedad Civil en pro de estudiar, orientar, canalizar o ayudar a las mujeres víctimas de trata, el panorama sigue siendo gris. La Universidad Autónoma de Tlaxcala en conjunto con la Universidad Nacional Autónoma de México a través de la Unidad de Atención Integral a la Mujer, recien inaugurada, también trata de poner su granito de arena para digdificar el papel de la mujer.
Y el protagonismo, ese a la orden del día
Rosi Orozco ha trabajado a favor de las víctimas de trata de personas que han sufrido diferentes formas de explotación, por ejemplo sexual. La actual Secretaría de Gobierno del Estado está encabezada por una mujer, que por cierto, a la fecha no ha emitido opinión alguna al respecto.
En el Senado de la república mexicana, la Comisión de la trata de personas es lidereada por una “mujer apizaquence”, pero su trabajo ha sido nulo y poco favorecedor para las mujeres mexicanas, particularmente, para dignificar a las mujeres tlaxcaltecas. La senadora Dávila Fernández debería de trabajar arduamente, para acabar con el estigma que se tiene de Tenancingo a nivel nacional y mundial. Lo más sonado de Dávila Férnandez son dimes y diretes entre ella y Rosi Orozco.
Tlaxcala es de los estados más bonitos y nobles que tiene México, no nos merecemos que nos identifiquen y que nos hagan burla por el caso de las mujeres de Tenancingo.
Jorge Rodríguez Antolín
Centro Tlaxcala de Biología de la Conducta
Posgrado en Ciencias Biológicas
antolin26@gmail.com
@jorantolin