¿Por qué comemos en exceso?

Por Lizbeth Ortega Campech

Bien dice el refrán de la vista nace el amor y nada equivocado está, ya que la vista y el olfato son los primeros sentidos que se despiertan al entrar en contacto con un alimento apetecible. Y estos pueden estimular ciertas señales fisiológicas como incremento de la salivación, liberación de insulina y secreción de ácido gástrico. Estas señales retroalimentan al cerebro, interpretadas como hambre y también como apetito. Estas características contribuyen también al inicio de la ingesta de alimentos. Sin embargo, estas mismas señales sensoriales pueden determinar la saciedad y el cerebro tarda unos 20 minutos en reaccionar a la información que le llega desde las hormonas implicadas en el proceso de la digestión.

Pero ¿qué sucede durante todo este tiempo antes de llegar la información al cerebro? Bueno, existen algunas personas que pueden tener una predisposición psicológica instintiva de comer de forma compulsiva ya sea cuando te sientes triste, contento o estás pasando por un estado de mucho estrés, se come sin tener una plena conciencia de la  ingesta de alimento que se está consumiendo.

Por ejemplo ¿Cuántos de nosotros  después de comer nos  hemos  sentido muy llenos con una pesadez? bueno, eso es porque seguro comiste en exceso y te sientes con malestar y con  mucho sueño.

En realidad, sí no comiéramos en exceso, no tendríamos por qué sentir esa pesadez después de ingerir nuestros alimentos y sí la mayoría de estos fueran frutas y verduras tampoco nos sentiríamos a reventar.

¿Pero qué causa esto? La sobre ingesta es comer más allá de nuestra saciedad y es comer en exceso.

¿Pero cómo Puedo evitarlo? Bueno lo primero que debemos entender es que actualmente la sociedad nos indica el comer en exceso ya que cuando vamos a una fiesta o alguna reunión siempre nos ofertan un postre extra o un segundo plato de comía y ¿Cómo decir que no? Es complicado porque no quieres quedar mal con la persona que te lo invita, o cuando buscas un lugar para comer con los compañeros de trabajo ten por seguro que siempre buscaremos un buffet, porque ahí por un solo costo podemos comer hasta morir.

Y ni hablar de los productos industrializados los cuales nos mienten con la presentación de calorías y diciendo que son bajos en azucares o en grasas y cuando checas la tabla nutrimental te das cuenta que en realidad, las calorías que te pusieron frente al paquete habla de una sola porción y el empaque tiene 8 porciones.

 Y que en realidad sí contiene azúcar y exceso de grasa, ¿te das cuenta? En realidad estamos rodeados de productos los cuales no nos nutren pero nos invitan a consumir por medio de la mercadotecnia y engañándonos respecto a si son sanos o no lo son.

 Pero el verdadero  problema es que puede caerse en un círculo vicioso porque el cerebro experimenta gran sensación de placer cuando se consumen sustancias (comida alta en azúcar, carbohidratos y/o grasa) que lo hacen liberar serotonina y dopamina como respuesta, lo cual lo hacen sentirse bien”, explicó.

Luego, quiere más de la sustancia cada vez que se está sintiendo mal y cada vez necesitan más de la sustancia para sentir el mismo placer y se sienten mal después de consumirla.

Ahora bien, hemos aprendido que todo está en nuestro cerebro ¡pero! ¿Sabías qué existen alimentos que dan mayor saciedad y no incrementan tu peso?, estos pueden ser tus aliados, las hojas verdes además de la cantidad de fibra (dan saciedad), éstas exigen ser bien masticadas y por este movimiento es un mecanismo indispensable para avisarle al cerebro que es hora de parar de comer.

El consumir carnes magras estas tiene todos los complementos para que te sientas en plenitud, la linaza esta fuente de fibra puede ser mezclada en yogurt o ensaladas,  Avena mejora el tracto intestinal  además de mantenerte saciado por más tiempo,  Salvado de trigo y manzana por ejemplo son otros alimentos que contienen fibra.

Pero lo más importante es tomar la plena conciencia de la cantidad de alimento que consumimos, ya aprendimos que tenemos 20min. Antes de que le llegue la información a nuestro cerebro y que el proceso de digestión inicia desde el momento de ver el alimento a lo cual te invito a tomarte tu tiempo para comer, en un espacio tranquilo y que mastiques adecuadamente y sin distractores como televisor, celular etc. Ya que este tipo de situaciones pueden hacer que no nos demos cuenta de la cantidad de alimento que estamos ingiriendo.

¡Recuerda siempre! La salud es responsabilidad de cada uno de nosotros tú la tienes en tus manos a sí que manos a la obra.

Citas y consultas al (044) 246-121-85-67.