Coyuntura/La senadora Lorena Cuéllar Cisneros propuso otorgar las libertades a los “menores maduros” para que puedan ser reconocidos ante la sociedad y que, a su vez, puedan hacer valer sus decisiones en actos que les afectan directamente en términos de salud, profesional o legal.
Al fundamentar su propuesta para modificar la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, la senadora afirmó que en México, la capacidad de elegir por parte de los jóvenes de entre 16 y 18 años de edad se ve limitada para que decidan libremente sobre su cuerpo e integridad al imponer la voluntad de los padres o instituciones sobre la suya.
La legisladora por Tlaxcala comentó que la Convención sobre los Derechos del Niño define como niño a todo ser humano menor de 18 años, como término general mas no restrictivo y dentro del artículo 12 menciona que los Estados parte deben garantizar al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio para expresar su derecho a una libre opinión en todos los asuntos que le afectan en función de la edad y madurez del niño.
“Un claro ejemplo de cómo este derecho toma especial relevancia es en materia sanitaria, cuando en el rango de edades de 16 a 18 años se reconoce la capacidad de este grupo de menores para decidir acerca de la intervención médica sobre su cuerpo, es decir cuentan con criterios propios, información y lógica suficiente para determinar si desean o no recibir cierto tipo de tratamientos”, indicó.
Cuéllar Cisneros señaló que la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes se concibió como una herramienta que fortalece el marco jurídico para la protección y ejercicio de los menores mexicanos.
“Sin embargo, aún no cuenta con el concepto de ‘menores maduros’ en su redacción, frenando el pleno goce de sus derechos a aquellos menores que ya cuentan con elementos suficientes para probar su madurez bajo determinadas circunstancias”, aseguró.
La legisladora apuntó que su propuesta tiene como objeto reconocer a este grupo poblacional como titulares de derechos de conformidad con los principios de progresividad que se reconocen en nuestra Carta Magna y los Tratados Internacionales.
En ese sentido, la iniciativa modifica el artículo 5 de la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes para que sean reconocidos como menores maduros los adolescentes mayores de 16 y menores de 18 años que, a juicio de las instancias competentes, cuenten con capacidad suficiente para involucrarse y tomar decisiones que afecten directamente su integridad, servicios médicos, educativos o legales.
La iniciativa fue turnada a las comisiones de los derechos de la Niñez y Adolescencia y de Estudios Legislativos para su análisis y posterior dictamen.